Cuando la crisis tarda en pasar, las preocupaciones comienzan a aumentar y es necesario revisar las políticas, procesos, estrategias y acciones de la empresa en busca de reducir riesgos para que el negocio pueda seguir sustentable hasta que pase la crisis. Pero, ¿Cómo actuar en la gestión para reducir los impactos negativos y mantenerse en operación plena? ¡Vea nuestros consejos!
Todo tiene un impacto financiero
Mantener la salud financiera de la empresa debe ser su primera preocupación, después de todo, sin dinero no hay cómo mantener las cosas funcionando. Por lo tanto, evalúe su flujo de caja, observe las proyecciones financieras y revise su retorno de capital. ¿Por cuánto tiempo se puede mantener la empresa con el mínimo de recursos entrando?
Si es necesario, rehaga su planificación financiera para reducir costos, ya sea con inversiones, nuevas contrataciones o equipos que no necesitan ser adquiridos en el momento. Vea cómo está su índice de incumplimiento de pagos y actúe fuertemente en la recaudación de los clientes deudores con un buen sector de cobranzas.
Limpie los procesos
La eficiencia, eficacia y productividad andan juntas, por lo tanto, limpiar los procesos trae oportunidades de eliminar desperdicios y hacer que las cosas sean más productivas y rentables. Coloque a sus trabajadores para que piensen sus rutinas y creen procesos más ágiles, que dispersen la burocracia, los papeles y las responsabilidades. AL reducir la cantidad de actividades, liberará a las personas para que ejecuten actividades más estrategas e importantes para el negocio.
No dependa de un único proveedor
Así como usted, sus proveedores también enfrentan la crisis y son susceptibles a problemas financieros y operacionales. Si usted depende de un único proveedor y este deja de tener la capacidad de atenderle, su empresa estará en dificultades. Lo mejor es diversificar los proveedores y tener siempre un respaldo para las horas de mayor necesidad.
Mantenga un ojo en su negocio y el otro en el mercado
Es claro que usted necesita concentrarse en su negocio para mantenerlo en funcionamiento, pero, este está sujeto a los cambios del mercado, lo que exige que también le preste atención. Los intereses, la variación de los tipos de cambio, la inflación, el desempleo y otros indicadores pueden afectar directamente a sus finanzas, así que tenga siempre en cuenta lo que las tendencias del mercado dicen.
Revise periódicos y sitios especializados, nacionales e internacionales, para saber cuáles son las previsiones futuras. Converse con otros empresarios del sector, debata sobre los temas más relevantes y manténgase siempre informado sobre todo lo que pueda impactar negativamente a su empresa.
Reduzca los riesgos de negocio
Si usted tiene aplicaciones e inversiones, revíselas. ¿Es ventajoso mantenerlas incluso en tiempos de incertidumbre? ¿Es posible utilizar algunas aplicaciones para eliminar deudas con proveedores o impuestos atrasados? Recuerde que cuantas menos deudas usted tiene en ese momento mejor, pues las tasas de interés son altas y pueden comprometer buena parte de su presupuesto.
Fortalezca la comunicación de su empresa con los principales stakeholders
Cuando la crisis amenaza un mercado o negocio específico, es natural que los socios, inversores, clientes y otros stakeholders se sientan inseguros. En ese momento usted necesita presentar una comunicación clara y asertiva para mantenerlos a todos unidos a favor de su empresa.
Si el cliente no compra, no entra dinero, sus empleados y proveedores no reciben dinero, los socios no son remunerados y todo esto se convierte en una bola de nieve difícil de combatir en el futuro. Lo mejor es dialogar con esos públicos, tranquilizarlos y mantenerlos confiados de que la crisis es pasajera y que su empresa va a superar ese obstáculo y va a salir fortalecida.
Y usted, ¿cómo piensa combatir la crisis y salir bien? ¡Deje su comentario y comparta sus percepciones!
