gestión estratégica

Cómo mejorar la productividad de tu empresa en 2019

Tu empresa está funcionando bien en términos de operación, pero ¿cree que puedes hacerlo mejor en 2019? A menudo, la ejecución de un proyecto lleva más tiempo de lo previsto, o las reuniones duran horas y al final no llegan a ninguna conclusión. Fue un momento perdido y sin ninguna productividad. Además del establecimiento de metas, cuando hablamos de mejorar la productividad de la empresa, tenemos que hablar de control de tiempo, objetivos estratégicos, comunicación y organización, y herramientas que ayuden en el control corporativo, facilitando el proceso productivo de cada empleado, y obteniendo resultados positivos sobre tus actividades. Después de todo, no todos los días te sientes como la persona más productiva del mundo y puedes cumplir con todo lo que se planeó previamente. Para ayudarte, hemos creado un “paso a paso” de productividad, que a medio o largo plazo te aportará beneficios y facilitará tu rendimiento. Vayamos a los escenarios: Controla tu tiempo La primera acción a tomar para mejorar la productividad es medir la cantidad de tiempo que te toma realizar una tarea. Puede ser que una actividad en tu empresa esté estancada o que esté pasando por pasos innecesarios que prolongan aún más su tiempo de ejecución. Para resolver esto, habla con tus empleados y escucha qué es lo que ellos piensan que se puedes mejorar. Después de entender las necesidades de la empresa y de cada empleado, es hora de organizar y distribuir mejor el tiempo que se invertirá en cada actividad, y el tiempo que cada uno demanda. Es extremadamente importante darse cuenta de cuánto tiempo pasa el equipo discutiendo sobre las demandas actuales o cuestiones externas, para que el tiempo sea optimizado y bien utilizado, sin perjudicar la productividad en su conjunto. Objetivos Estratégicos Cuando hablamos de productividad en una organización, estamos hablando de cómo una empresa genera valor para sus clientes, empleados, la sociedad y sus grupos de interés a corto o largo plazo. Incluso si una empresa tiene una misión concreta y una visión motivadora, esto no será suficiente si estos deseos de generar valor no se transforman en un plan estratégico para ser ejecutado. Es necesario, además de una planificación impecable, saber hacer que todo lo que se ha propuesto se siga y se logre con compromiso y, en su momento, vemos la dificultad que tienen las personas para poner en práctica los objetivos productivos estratégicos. No tiene sentido tener grandes ideas si no sabes cómo hacerlas realidad. Sin embargo, necesitamos establecer una disciplina de implementación y seguirla al pie de la letra para lograr resultados significativos, y no sólo para ser bosquejos. Comunicación Interna La comunicación interna es un área de comunicación integrada con un enfoque totalmente centrado en el empleado de la empresa. Se trata de compartir información relevante y estratégica en un entorno corporativo. El objetivo principal es mantener a tus empleados comprometidos con las metas, ideales y causas de la organización, convirtiéndose en un gran aliado en el tema de la productividad. A través de la comunicación interna, se anima a los empleados a establecer una relación interpersonal, que aporta beneficios directos a su entorno de trabajo. Con una mayor implicación de los empleados, la relación aumenta y el equipo se fortalece, contribuyendo así a un clima más ligero, respetuoso y productivo. Organización y Herramientas Para aumentar la productividad, es esencial trabajar en la organización de las tareas. Esta etapa puede incluso considerarse obvia, pero muchos terminan poniendo sus esfuerzos en acciones que no son prioritarias precisamente porque no tienen una visión más amplia de sus tareas. La idea aquí no es sólo saber lo que hay que hacer la semana que viene, sino tener una visión general y estratégica: qué actividades deben llevarse a cabo primero y cuáles pueden posponerse, por ejemplo. Otra forma de evaluar cómo va la productividad en la empresa es hacer una comparación de lo Planificado con lo Realizado. Cuando termines un proyecto, veras si todo sucedió de la manera en que se suponía que debía hacerlo y si el tiempo que tardó en completarse la tarea está dentro del alcance. Utiliza herramientas que te ayuden como mapas mentales, y gestión estratégica y de tiempo. ¿Te ayudó este artículo? ¿Quiere aumentar la productividad y los resultados de tu empresa? ¡Ponte en contacto con nosotros y ten más eficiencia en tu empresa!