Similar a la gestión por directrices, la metodología OKR ha despertado el interés de varias empresas que buscan desarrollar una gestión basada en indicadores y objetivos. Además, esta herramienta de gestión se ha convertido en un medio ideal para promover una cultura de alto rendimiento, evaluada a través de los resultados obtenidos.
Sin embargo, un breve estudio sobre el OKR suele generar más preguntas que respuestas. Teniendo esto en cuenta, hemos preparado un artículo completo que ofrece consejos sobre el concepto, un paso a paso sobre cómo funciona la aplicación del OKR y mucho más. ¡Disfruta de la lectura!
¿Qué es el OKR?
OKR significa «Objectives and Key Results» en inglés, que en español puede traducirse como «Objetivos y Resultados Clave». Pero para que lo entiendas mejor, es importante saber que esta metodología ágil tiene dos elementos principales:
1- Objetivo (O): representa lo que la empresa quiere conseguir. Los objetivos deben ser significativos, concretos, orientados a la acción e inspiradores. Cuando están bien diseñados y aplicados, se convierten en un antídoto contra el pensamiento y la ejecución confusos. En general, una organización fija entre 3 y 5 objetivos por periodo.
Por exemplo, um objetivo poderia ser “Dominar a região sudeste do Brasil”.
2- Resultados clave (KR):: establecen y supervisan el progreso hacia el objetivo. Los Resultados Clave deben ser específicos, limitados en el tiempo, ambiciosos pero realistas, medibles y verificables. Por lo general, cada objetivo seleccionado tiene asociados hasta 5 Resultados Clave (metas).
Para o objetivo fictício de “Dominar a região sudeste do Brasil”, uma empresa poderia definir os seguintes Resultados-Chave (KRs): KR1 – “Aumentar a participação de mercado na região sudeste de X% para Y%”, KR2 – “Aumentar o faturamento na região em Z%”, e KR3 – “Patrocinar um grande evento local”. O sucesso na conquista desses Resultados-Chave determina se o objetivo foi alcançado e em que medida.
Aunque a primera vista pueda parecer un sistema común de objetivos y metas, el OKR difiere significativamente de las metodologías tradicionales.
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¿Cuál es el origen del OKR?
La metodología OKR fue creada en los años 70 por Andrew Grove, CEO de Intel, y se dio a conocer al público en su libro » Administración de alto rendimiento». En él describía cómo se llevaba a cabo la gestión de objetivos y empleados en Intel, proporcionando una visión temprana del OKR.
Intel desarrolló el OKR como respuesta a los rápidos avances tecnológicos y a las transformaciones del mercado de la época. Se necesitaba un modelo de gestión que permitiera a las empresas adaptarse rápidamente a estos cambios.
Sin embargo, la historia del OKR no cobró impulso hasta 1999, cuando John Doerr, un reputado inversor de capital riesgo, presentó el modelo a Larry Page y Sergey Brin, fundadores de la entonces pequeña empresa llamada Google.
Desde su fundación en 1999, cuando sólo contaba con unas 40 personas, la empresa se ha expandido hasta tener más de 60.000 empleados en la actualidad. Desde entonces, la metodología ha obtenido un gran reconocimiento por su capacidad para apoyar el crecimiento de Google. Este éxito demuestra que tanto las pequeñas empresas como las grandes corporaciones pueden adoptar el método con éxito.
Cómo implantar el OKR en 6 pasos
Ahora que conoces todas las ventajas del OKR y cómo puede hacer avanzar a tu organización de forma ágil y eficaz, puede que te estés preguntando cómo empezar a implementarlo. Pero no te preocupes,estamos aquí para ayudarte con los 6 pasos clave para la implementación.
1- Establece objetivos claros y específicos:
- Establece metas claras y específicas para los objetivos principales y los resultados clave.
2- Combina abordagens top-down e bottom-up:
- Incluye tanto a los líderes y directivos como al equipo en el establecimiento de los objetivos.
- Los líderes pueden aportar el 40% de los OKR, mientras que el resto lo define el equipo.
3- Establece plazos cortos y razonables:
- Evita los objetivos a largo plazo, ya que pueden entorpecer el proceso y disminuir la eficacia.
- Fija plazos razonablemente cortos, como trimestres, para mantener la sensación de urgencia y disponer de tiempo suficiente para hacer el trabajo.
4- Supervisa los resultados constantemente:
- Realiza un seguimiento constante de los resultados para garantizar la coherencia del trabajo.
- Evalúa los resultados con regularidad, preferiblemente a intervalos semanales, para poder realizar ajustes rápidos y tomar decisiones con conocimiento de causa.
5- Haz que los OKR sean visibles para todos:
- Promueve la transparencia compartiendo objetivos y resultados con todos los empleados.
- El objetivo es mantener a todo el mundo informado y garantizar que el proceso sea comprendido por todos.
6- Diferencia esfuerzos y resultados:
- No hay que confundir esfuerzo y dedicación con resultados efectivos.
- Céntrate en métricas y resultados tangibles para medir el progreso, en lugar de confiar únicamente en el sentimiento de unión y el esfuerzo colectivo.
Estos pasos son esenciales para la aplicación eficaz de la metodología OKR y para garantizar la colaboración y el compromiso de todo el equipo.
Los 4 pilares del OKR
Comprender la filosofía y el propósito que hay detrás de los OKR es aún más crucial que entender su estructura. Comprueba cuáles son los cuatro pilares fundamentales de los OKR:
Ambición:
Los OKR deben ser ambiciosos en el sentido más puro de la palabra. El objetivo principal (OKR) no debe ser imposible de alcanzar, pero tampoco debe ser fácil. Tiene que inspirar a los empleados y dar sentido y significado al trabajo realizado.
Mensurables:
Tu OKR no puede ser vago, como «ser una empresa más cool», ya que perjudica la medición de un objetivo. Debe ser específico y tener criterios claros para medir el éxito.
Y lo que es más importante, los OKR son datos que ayudan a determinar si se han alcanzado los objetivos fijados. Por lo tanto, es necesario disponer de medios para cuantificar el éxito de los OKR.
El objetivo establece hacia dónde quiere ir la empresa, mientras que los resultados clave definen el camino y el progreso hacia su consecución.
Transparencia:
Es sumamente importante que todos los miembros del equipo tengan acceso a los OKR de otras áreas y empleados de la empresa. Esto no sólo estimula la productividad mediante una «competencia sana», sino que también establece un medio para que todos sepan cuáles son las prioridades de sus colegas y de las distintas áreas.
Unificación:
Los OKR de los empleados deben alinearse con los OKR de los equipos, que a su vez deben alinearse con los OKR de la empresa en su conjunto. Unificar e integrar tareas y misiones a todos los niveles es uno de los mayores retos de la metodología, pero también uno de los mayores beneficios.
Mejora la eficacia de los OKR con una plataforma multimétodo
Después de seguir todos estos pasos, ¿sigues teniendo dificultades para centralizar todos los resultados de tu empresa en un único lugar debido al uso de hojas de cálculo y a la utilización de diferentes metodologías de gestión en cada área? Entonces, es el momento de considerar la contratación de un software de gestión especializado, como Tune
Tune es un completo software de Actio, que centraliza todas las necesidades de la empresa, tanto en términos de desarrollo como de seguimiento del rendimiento y los resultados. Ofrece diferentes metodologías, como BSC, OKR, PDCA, ESG y otras, para que puedas elegir la que mejor se adapte a las necesidades de tu organización.
Confira abaixo como o OKR funciona na plataforma do Tune:
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