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ToggleConozca el método OKR, una metodología utilizada por los gigantes de la tecnología y que puede aplicarse en tu organización.
Después de leer el artículo, echa un vistazo al «On the Spot» sobre los OKRs en nuestro Youtube.
Las empresas y los líderes de todo el mundo buscan ser cada vez más ágiles y eficientes para alcanzar sus metas y objetivos. Para ello, es necesario invertir en herramientas de gestión que ayuden a aumentar el rendimiento, incluyendo a los colaboradores, que son los que hacen que todo suceda
Es en esta búsqueda incesante de mejores resultados que el método OKR se ha convertido en uno de los favoritos del mercado. Al ser una herramienta muy sencilla, cada vez gana más adeptos en el entorno empresarial. Sin embargo, su proceso de implantación puede ser un poco complejo al principio, sobre todo si se aplica en una gran escala.
Por isso, nós que somos expertos en gestión, preparamos este contenido para que entiendas mejor en qué consiste el método OKR, cuáles son sus ventajas y cómo aplicarlo en tu empresa. ¿Estás listo?
Origen
Objective and Key Results (OKR) es un método de gestión sencillo y flexible que promueve el compromiso de los colaboradores para aumentar la productividad de la organización. Significa, Objetivos y Resultados Clave y fue desarrollado por Andrew S. Grove, antiguo director general de Intel, en la década de 1970.
Pero no fue hasta 1999 cuando el método se popularizó, cuando John Doerr, un inversor de Google, lo presentó a los directivos de la empresa y fue en ese momento cuando adquirió notoriedad en el mundo empresarial. Cuando se presentó el método al gigante tecnológico, la empresa tenía menos de 50 empleados. En la actualidad, cuenta con más de 85.000 colaboradores, lo que demuestra que, además de adaptarse a empresas de distintos tamaños, ha sido capaz de soportar el vertiginoso crecimiento de Google en los últimos años.
Pero, ¿qué es el método OKR?
El famoso método que ha hecho las delicias de empresas como Google, Twitter, Spotify, Airbnb, Linkedin y tantas otras, es en realidad una estrategia de movilización para aumentar la productividad haciendo lo correcto en el momento adecuado.
Permite a las organizaciones visualizar mejor sus prioridades y cómo se relacionan o no con las estrategias y objetivos más amplios de la empresa. Básicamente aclara qué hacer y por qué hacerlo. y por que fazer.
Los dos pilares principales son los objetivos (O) y los resultados clave (KR). Para que lo entiendas mejor, te explicaremos cada uno de los puntos:
Los objetivos (O) deben exponer de forma directa y resumida la dirección que quiere seguir la organización. Hay que describirlos de forma impactante para que despierten el interés de todos los colaboradores.
En cuanto a las palabras clave (KR), podemos definirlas como las metas que tendrán un impacto directo en el proceso para lograr los objetivos que se deben alcanzar. Recuerda que los objetivos deben ser cualitativos. Los resultados clave, en cambio, son cuantitativos y presentan datos más concretos sobre los objetivos al final del periodo.
Generalmente, el método se aplica durante un periodo predeterminado. Una vez completado, se evalúan los resultados y se definen nuevos OKRs para esa organización.
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¿Y qué beneficios aporta el método OKR a las organizaciones?
Si tantas empresas, incluyendo a los gigantes de la tecnología los utilizan, ya te puedes imaginar que los beneficios existen. Pero, para empezar a mostrarte por qué deberías invertir en la implantación de OKRs en tu empresa, separamos 9 de los motivos más importantes. Vamos a conocerlos…
1-Transparencia
Uno de los valores de este método es la transparencia, una característica esencial en la relación empresa/colaborador y cada vez más valorada en el mercado. El enfoque, en el método OKR, es el éxito del conjunto y, por lo tanto, la puesta en común de los objetivos de forma transparente con todo el equipo es esencial, mostrando cómo cada uno está contribuyendo a la consecución del resultado
2 – Herramienta de fácil enseñanza
Uno de los principales puntos positivos es que el OKR es didáctico y fácil de ponerlo en practica. No necesitas una formación específica ni un equipo técnico para poder aplicarlo en tu organización. Con el entrenamiento es posible alcanzar la eficacia del método rápidamente.
3 – Agilidad
El OKR es una metodología ágil y permite desglosar los objetivos más grandes en otros más pequeños para llegar al resultado. Por ejemplo, puedes dividir el objetivo de todo un año en trimestres. De este modo, es posible evaluar los resultados obtenidos hasta el momento en cada periodo, ayudando a aumentar la productividad y agilidad de todos.
4 – Alineamiento del equipo de trabajo
El OKR garantiza el alineamiento de todo el equipo, cada uno en su área, con los objetivos y la estrategia de la empresa. También es muy importante para que los diferentes sectores de la empresa no tengan objetivos contradictorios.
5 – Mayor enfoque
A la hora de fijar objetivos tendemos a irnos lejos e imaginar miles de posibilidades, pero esto nos estorba a la hora de centrarnos en lo que realmente es importante para el momento. El OKR te asiste en el proceso, ayudándote a centrarte en la prioridad a corto plazo.
6 – Compromiso
Establecer objetivos es importante, pero no sirve de nada si sólo los conocen los líderes y los directivos, ya que para alcanzarlos es necesario que todo el equipo trabaje conjuntamente. En el método OKR, todo esto se define y se comparte de forma transparente, con todos los sectores y niveles jerárquicos. De este modo, el equipo en su conjunto se siente más animado, desafiado y motivado para formar parte de estos logros, aumentando el compromiso de todos.
7 – Crecimiento
Las empresas siempre buscan el crecimiento, sea cual sea. El OKR es ideal para encontrar donde es posible innovar, crecer y evolucionar en la organización, contribuyendo a la mejora continua del rendimiento y, en consecuencia, al crecimiento.
8 – Aprendizaje
Como ya lo hemos mencionado, el OKR tiene ciclos más cortos, lo que ayuda a la evaluación de los resultados para una toma de decisiones más rápida. Sin embargo, esto también ayuda al aprendizaje, ya que el equipo necesita agilidad para aprender y adaptarse para alcanzar los objetivos fijados para ese periodo.
9 – Resultados
Pues bien, todo lo anterior tiene un único objetivo: conseguir los mejores resultados. ¡Y eso es lo que proporciona el método OKR! Con toda su sencillez, el OKR sorprende a los equipos de todo el mundo por los resultados que genera. Todo ello, por supuesto, haciendo que el equipo esté más alineado y motivado, generando consecuencias positivas para todos, incluyendo a los clientes.
Como ves, no es de extrañar que Google, Twitter, Dropbox y tantas otras empresas utilicen esta metodología. ¿Qué esperas para aplicarlo en tu organización?
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¿Cómo aplicar el OKR en mi organización?
Ya has visto todas las ventajas del OKR y lo que puede hacer por tu organización de forma rápida y sencilla. Pero ahora te estarás preguntando: ¿por dónde empiezo a aplicarlo? Tranquilo, también te ayudaremos con eso.
Para ti, que estás interesado en esta metodología, consulta ahora algunos pasos sencillos que deberías seguir para empezar a implementar el OKR en tu empresa hoy mismo.
Paso 1 – Propósito
Todas las empresas existen por una razón. Se llama propósito. ¿Cuál es el objetivo del tuyo? Con esto en mente, comienza a pensar en los objetivos que debe alcanzar la organización.
Paso 2 – Periodicidad
En función de tu organización y de las exigencias de tu empresa, define los ciclos de los OKR. Los ciclos deben ser preferiblemente cortos. Sin embargo, este tiempo puede variar de una empresa a otra, desde 2 meses hasta un año. Todo depende de la necesidad y del momento en que se encuentre la organización.
Paso 3 – Definición de los OKRs
Es el momento de que la empresa defina los OKRs y los comunique a los sectores para que todos estén alineados con los objetivos. Recuerda la importancia de que todos los implicados en el proceso de definición participen hasta el final.
Paso 4 – Alineamiento
Una vez definidos los objetivos, es el momento de comunicar y alinear las expectativas con todo el equipo, en todos los sectores y niveles jerárquicos. Así, los equipos podrán elaborar sus propios OKR que contribuirán a alcanzar el objetivo mayor. Reforzamos la importancia de que todos los miembros de la empresa participen en este proceso para lograr el resultado esperado.
Paso 5 – Acompañamiento
¿Tienes los objetivos definidos y alineados con toda la empresa? Entonces, es el momento de empezar a ponerlo todo en práctica y de realizar verificaciones periódicas para poder seguir la evolución de los resultados. Como los ciclos son cortos, recomendamos que la verificación se haga semanalmente para identificar los problemas y, si es necesario, solucionarlos.
Paso 6 – Revisión
Al final de cada ciclo, es importante revisar los OKRs definidos. Es esencial que todo el equipo esté unido, al fin y al cabo, si el resultado fue un éxito, el mérito será de todos y si el resultado no es el esperado, es fundamental que todos juntos encuentren los puntos a mejorar. La esencia de esta metodología es precisamente aprender rápidamente y adaptarse al cambio.
Qué características debe tener un OKR
Para que sea funcional y de hecho un OKR, hay algunas características que deben existir en los objetivos. Cada una de estas características tiene un impacto directo en la consecución de los resultados clave propuestos por la metodología. Antes de definir el OKR de tu organización, comprueba si cumple con alguna de las 5 características a continuación:
- Números: Si el objetivo (O) no tiene un número, no es posible medir el resultado clave (KR). Por lo tanto, un buen OKR debe contener números y ser medible para ser comprendido y mejorado.
- Comunicación: Los objetivos previstos deben estar muy bien explicados. Cuanto mejor sea la explicación, mejor será la alineación y la comunicación entre todo el equipo.
- Ciclos cortos: La planificación estratégica y la fijación de objetivos en las empresas suelen tener un ciclo de 12 meses. Los OKR deben tener ciclos cortos de aproximadamente 3 meses. Se trata de una metodología ágil y, por lo tanto, debe revisarse y modificarse con mayor frecuencia para encontrar errores y lograr los mejores resultados.
- Simplicidad: A la hora de fijar los objetivos, escriba con sencillez y claridad para garantizar una comunicación eficaz.
- Colaboración y autonomía: El OKR prevé la alineación de todo el equipo para obtener el resultado esperado. Por lo tanto, por más que existan objetivos top-down, también se destaca la importancia de los objetivos botton-up. En otras palabras, los líderes definen objetivos que deben ser comunicados a los demás equipos, para que éstos también definan metas en función de los objetivos mayores, contribuyendo a alcanzarlos cada uno en su sector.
Estos son algunos ejemplos de OKRs
Ya hemos hablado mucho de la teoría detrás del OKR, ¿qué tal si vemos en la práctica cómo se definen los objetivos y los resultados clave? Aquí tienes 3 ejemplos para que puedas entender mejor.
- Ejemplo 1
Objetivo: Aumentar la producción en un 20% de aquí a final de año
Resultados clave:
- Contratar a 15 empleados;
- Invertir en nuevos equipos y renovar la mitad de ellos antes de agosto.
- Ejemplo 2
Objetivo: Aumentar el nivel de satisfacción de los clientes
Resultados clave:
- Realizar un NPS con 500 personas hasta junio;
- Desarrollar acciones para fortalecer la relación con el cliente hasta agosto.
- Ejemplo 3
Objetivo: Ser una referencia en el segmento
Resultados clave:
- Aumentar la cuota de mercado en un 30%;
- Aumentar la facturación en un 20% respecto a la competencia.
¿Ves cómo el OKR puede transformar la forma en que tu empresa aborda los objetivos de una manera sencilla y práctica?
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