El plan estratégico es un proceso complejo que involucra varios factores, lo que puede dificultar obtener una visión amplia de todos los elementos involucrados. Sin embargo, usar un mapa estratégico basado en el Balanced Scorecard (BSC) puede ser la herramienta ideal para ayudarte en esta tarea.
Pensando en esto, hemos creado este blog. Lee y aprende a usar el mapa estratégico del Balanced Scorecard para identificar los objetivos correctos y conectar todas las piezas del rompecabezas. Además, evita fallas, establece prioridades y alcanza tus metas con excelencia. ¡Buena lectura!
¿Para qué sirve un mapa estratégico?
Un mapa estratégico es una herramienta esencial para dirigir y concretar planes de manera clara y eficiente. Para que entiendas mejor, piensa en la definición de las dos palabras que forman el término: "mapa", que representa la orientación y conducción, y "estrategia", que implica la planificación y las decisiones que se tomarán. En general, el mapa estratégico es una representación visual que muestra el camino a seguir en el desarrollo de las estrategias.
Además, esta herramienta también desempeña un papel fundamental en la comunicación, ya que es necesario que todos los involucrados estén al tanto de los objetivos, estrategias y cómo se alinean con la misión, visión y valores de la empresa. Por eso el mapa estratégico proporciona una imagen clara e integrada de estos elementos.
En general, un mapa estratégico puede usarse para:
- Organizar estrategias;
- Estructurar los planes de acción de una empresa;
- Visualizar los objetivos y planes de forma clara;
- Representar el papel de cada sector en los objetivos organizacionales;
- Dirigir esfuerzos de manera sincronizada;
- Presentar a todos el plan estratégico y las medidas para mejorar los procesos.
Ahora que ya comprendiste las utilidades de un mapa estratégico, es hora de aplicarlo a la metodología del Balanced Scorecard (BSC).
¿Qué es el mapa estratégico en el BSC?C?
Para que entiendas mejor, es importante refrescar el concepto y el propósito del Balanced Scorecard (BSC).
El BSC fue desarrollado por Robert Kaplan y David Norton, renombrados profesores de la Harvard Business School y, desde su inicio, revolucionó los sistemas de evaluación tradicionales, ya que se concentra principalmente en la perspectiva financiera.
Al crear esta importante herramienta de análisis, Kaplan y Norton idearon cuatro perspectivas principales:
- Financiera: analiza cómo las decisiones estratégicas afectan el desempeño financiero de la empresa.
- Clientes: evalúa la actuación en el mercado y la satisfacción de los clientes.
- Procesos Internos: se enfoca en la calidad y la innovación de los procesos realizados por la organización.
- Aprendizaje y Crecimiento: evalúa la satisfacción interna de los colaboradores y la inversión en su desarrollo.
Mira en la imagen a continuación cómo funciona el Mapa estratégico en el BSC:
Vale destacar que la principal propuesta del BSC es, sobre todo, ayudar a las empresas en la implementación de sus estrategias, utilizando un mapa estratégico que estructura todo el plan de acción con base en la misión, visión, valores y objetivos estratégicos del negocio. Además, este mapa proporciona una representación visual que simplifica la comunicación del plan de la empresa a los colaboradores, destacando el impacto del trabajo individual de cada uno para el éxito de la organización.
Para crear el mapa estratégico, es necesario usar las cuatro perspectivas del BSC. Sin embargo, para que su aplicación se realice con eficiencia, te aconsejamos seguir algunas etapas.
5 etapas esenciales para montar un mapa estratégico eficiente
Para elaborar un mapa estratégico eficaz, es necesario seguir cinco etapas esenciales. Estas etapas se basan en el enfoque de arriba hacia abajo, que parte de una visión macro a una visión más específica. Aquí están las etapas:
Define la visión de futuro:
Primero, comienza estableciendo tres fundamentos esenciales para la empresa: misión, visión y valores. La misión debe describir claramente el propósito de la empresa y cómo agrega valor a los clientes. Mientras que la visión establece un objetivo a largo plazo que motiva a los colaboradores, los valores definen las características y la manera en que la empresa se presenta al mercado para alcanzar la visión y cumplir los objetivos.
Establece temas estratégicos:
Determina los temas estratégicos que resumen las grandes dimensiones que la empresa seguirá. Estos temas representan las principales estrategias de la empresa, como internacionalización, expansión geográfica, enfoque en el cliente o excelencia operacional. Se recomienda trabajar con 2 a 4 temas estratégicos para mantener el foco y la claridad.
Elige las perspectivas del negocio:
Selecciona las perspectivas del negocio que serán adoptadas. El Balanced Scorecard, sugiere cuatro perspectivas principales: financiera, cliente, procesos internos y aprendizaje y desarrollo. Estas perspectivas funcionan bien para empresas privadas y con fines de lucro, pero pueden adaptarse para otros tipos de organizaciones, considerando sus necesidades específicas, como entidades públicas.
Define objetivos estratégicos:
Traza los objetivos estratégicos que se enmarcan en cada perspectiva del negocio. Los objetivos estratégicos son directrices que demuestran los cambios que la empresa desea lograr, como optimización de la logística, construcción de un equipo capacitado o mejora de los procesos internos. Además, es importante distribuir estos objetivos estratégicos en las perspectivas relevantes.
Señala las relaciones de causa y efecto entre los objetivos:
Finalmente, identifica las relaciones de causa y efecto entre los objetivos estratégicos. Muchas veces, la realización de un objetivo es fundamental para alcanzar otros. El BSC enfatiza que los objetivos asociados a las perspectivas inferiores son esenciales para la realización de los objetivos en las perspectivas superiores.
Siguiendo estas cinco etapas, puedes crear tu mapa estratégico. Recuerda adaptar el modelo de acuerdo con las actividades y necesidades específicas de tu empresa, ya sea en el sector de comercio, prestación de servicios o cualquier otro ramo de negocio.
Además, es importante usar el mapa como una guía durante el camino y ejecutar las acciones planificadas para alcanzar los indicadores establecidos. Mantente comprometido con la ejecución de las estrategias establecidas y ajústalas según sea necesario a lo largo del camino. Con determinación y enfoque, estarás en el camino para alcanzar el éxito deseado.
Potencia tus herramientas de gestión estratégica con una plataforma multimetodológica
Si tienes dificultades para centralizar todos los resultados de tu empresa en un solo lugar debido al uso de hojas de cálculo y a la utilización de diferentes metodologías de gestión en cada área, es hora de considerar la contratación de un software de gestión especializado, como Tune
Tune es un completo software de Actio, que centraliza todas las necesidades de la empresa, tanto en términos de desarrollo como de seguimiento del rendimiento y los resultados. Ofrece diferentes metodologías, como BSC, OKR, PDCA, ESG y otras, para que puedas elegir la que mejor se adapte a las necesidades de tu organización.
Con el Tune, es posible potenciar el rendimiento de todos los equipos, buscando la excelencia, el éxito y la calidad en los procesos. Al fin y al cabo, la plataforma permite elevar los resultados basándose en datos y métodos que hacen que la gestión sea más estratégica. Además, ahora con la integración con ChatGPT en nuestras soluciones , Tune dispone de un consultor virtual a través de inteligencia artificial para guiarte en la identificación de causas, asegurando resultados y consistencia metodológica en tus procesos. No te olvides de seguir Actio en Instagram, LinkedIn y Facebook.
